Hay tanto aquí dentro por mostrar pero por ahora las letras saben que no deben escapar. Saben que en el cuaderno cotidiano se tienen que quedar y esperar a que los días vengan por ellas.
Entre tanto amor las palabras vienen y van, es lo que siempre quize y aquí, en mis manos está una vez más.
Es extraño sentirse con los pies en el cielo y la cabeza en la tierra, aún cuando hay tanto sentir en este rojo baúl, quizás sea que entre sus verdes me envuelvo y me hacen vivir tanto como sentir que mis brazos no son brazos, son alas, y que puedo volar hacia al sur como suelen volar aquellas especies de la cual el cielo es su carretera cotidiana.
Creo que aquellos badenes por los que solia pasar se quedaron atrás, y ahora la señorita de los tres lunares bajo el ojo aprende a vivir, a sentir como el frío de las mañanas no entra en sus manos, como las letras, las palabras son cada aún más fuerte que su "yo" interior, que los sentimientos existen pero que hay que saber contenerlos por mucho tiempo, y esta señorita aprende a decir No! antes de sentir mil culpas sobre sus hombros...
Diría que me converti en un ser mas extraño aún, un ser que tiene el sentimiento bien envuelto para que nadie lo arranque de su rojo bául, un ser mas divertido y con mas historias que contar... algo extraño pero cierto :D
2 comentarios:
Me gustó :)
te extrañoooooo ;D
Chaú =)
Genial
Publicar un comentario